domingo, 11 de abril de 2010

Empezamos con dos polos. ¿Mantendrás tu naturaleza, o te atreverás a modificarla y disfrutarla junto con los demás?

-"¡Se golpeó la niña!... pero no ha llorado ¿verdad?
-"No"

-"Es de las que se aguantan, igual que mi nieta... pero eso no es bueno, luego no dicen lo que les pasa"

Pero, llorar por todo sin duda debe de ser cansado, tampoco puede ser bueno si se piensa que lo contrario es malo.
Es muy posible que, en efecto, a veces no mencione lo que le pase. Lo importante será,

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que sepa cuando es necesario hablar sobre lo que sienta o piensa.

No se puede decir que aguantarse es bueno, pero tampoco lloriquear por todo resulta "saludable".

Cuando se es chico, se piensa "ésta opción ó ésta opción", se escoge entre algo bueno ó algo malo. Por la protección de los padres, se pueden balancear entre los extremos. Pero resulta importante encontrar un punto medio, un balance, ¿será parte de crecer?.
Me resulta inimaginable que un pequeño viva su infancia pensando hasta lograr un comportamiento "perfecto", tanto interna (con su yo) como externamente (con los demás). Tardaría demasiado tiempo en hacer cosas normales, que en nuestro caso, el sentido "común" nos concede "directamente". Sería demasiado tiempo para considerarse "normal"... o considerarse como un comportamiento "perfecto".
Se aprende de la experiencia, y ésta nos ayuda a crecer con calma, debido a que claro... la experiencia es la única cosa que no se consigue sólo pensando.
Si no se comprueba en la realidad, es tan solo una hipótesis.
[Tal vez esta relación entre hipótesis de nuestra imaginación, y la dichosa comprobación mediante la experiencia, es la que marca el ritmo en que crecen las personas...]

Me salgo del tema, pero bueno...

Entonces, empe
zamos escogiendo entre opciones buenas y malas. Si somos reservados (y tomando en cuenta que normalmente el ser humano desea ser mejor) nos abrimos un poco para alcanzar un balance saludable. Y si somos muy abiertos, aprenderemos a ser un poco reservados con respecto a las cosas que descubrimos que no deben ser de "dominio público".

Siendo simples, no habría forma de nacer con una mala personalidad. Ya que desde un principio, por nacer sin conocimientos, irremediablemente nacemos descalibrados. Y durante nuestro crecimiento, nos calibramos de acuerdo a nuestro entorno [si es que lo deseamos].
Tal vez por ello, las personas mayores de edad, tienden a ser "buenas y sabias personas" [Claro, no me consta, pero por algo existen "frases" sobre los ancianos, que desde tiempos ancestrales la gente concuerda con ellas.]

Así pues.

Se vislumbra, algunas razones por las que mucha gente crece sin madurar.

Gracias a la protección de los padres y familiares, uno empieza viviendo teniendo que elegir entre cosas fáciles de discernir. Gracias al hogar, nuestra actitud inicial es aceptable. En pocas palabras, el mundo funciona.
Sin embargo, en el caso de vivir en una sociedad humana. Eventualmente si no se posee una personalidad "perfecta", se descubren los conflictos.

Y ya sea consciente o no, en ese momento uno descubre el ente "El Dilema".
El mundo que uno conoce funciona, ¿estás dispuesto a "descomponerlo", con tal de eliminar el conflicto? [Entre comillas, porque el miedo hace más grande la posibilidad subjetiva de que "mi mundo se salga de lugar" a "mi mundo será mejor"]

¿Te importa más que el mundo funcione para tí, o que éste sea mejor?

Peor para las posibilidades de crecer... ¿quién te asegura que escojerás la elección correcta y tu mundo será mejor?.
La posibilidad de "descomponerlo" es fuerte.

Pero el mundo no se "descompone", es imposible. Éste ha existido durante siglos antes que tú... hagas la elección que hagas no lo descompondrás, si acaso te equivocarás [o matarás a alguien en algunos casos extremos >_>... pero bueno no son situaciones tan comunes jejeje].

Dentro de ti existe el miedo, y existe el valor de enfrentarlo. Éso es una verdad, éso existe en todos. Analízalos lo que quieras, pero son sentimientos, no llegarás a ningún lado pensándolo.

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